Por un error, se dejaron de cobrar más de $2,000,00 en impuestos

Cuando te están realizando una auditoría, es obligatorio que la autoridad siga ciertos procesos que son inamovibles. 

Estos procesos son inamovibles porque están plasmados de esa manera en la ley para que la autoridad cuando lleve a cabo la revisión de tus impuestos no vulnere tus derechos humanos. 

Tal es el caso que le señala el artículo 63 del Código Fiscal de la Federación. Este artículo nos dice que cuando la autoridad solicite información de otras autoridades para revisar si tus contribuciones están bien pagadas, deberá darte a conocer dicha información para que tú tengas derecho a defenderte acerca de lo que dijo la otra autoridad. 

Así le sucedió a Jaime, que al momento de hacerle una auditoría, detectaron que uno de sus proveedores no contaba con personal, ni infraestructura para poder prestar los servicios que decía Jaime le había vendido. 

Entonces la autoridad auditora,solicitó al IMSS, INFONAVIT, registro público que le indicaran si este proveedor tenía registrados trabajadores o bienes a su nombre. Según la autoridad, si no contaba ni con personal ni con bienes serían la prueba perfecta para decir que las operaciones con ese proveedor eran falsas. 

Las 3 autoridades le contestaron que no contaban con ningún registro a nombre del proveedor. La autoridad auditora, para cumplir con el artículo 63 del CFF hizo un oficio para Jaime donde le platicaba que pidió información al IMSS, INFONAVIT y registro público y los 3 decían que ese proveedor no tenía registro ni de trabajadores ni de bienes y que le hacía llegar copias certificadas de los oficios con los que las autoridades habían contestado. 

Terminó la auditoría y resulta que por las operaciones con ese proveedor le determinaron un crédito fiscal por $2,000,0000. 

Cuando se inició el proceso para interponer los medios de defensa, el equipo de abogados se dio cuenta de un pequeño y al parecer para cualquier persona, insignificante error. La autoridad realizó incorrectamente la certificación de las copias que le entregó con la información del IMSS, INFONAVIT y registro público. 

El funcionario que hizo la certificación de las copias omitió algunos requisitos obligatorios para que se considere que la certificación estuvo bien realizada. 

Con este error, las copias certificadas que le entregó la autoridad a Jaime no tenían ninguna validez. Es como si nunca se las hubieran entregado. Y por esta razón vulneraron su derecho humano de audiencia (todos tenemos derecho a ser oídos y vencidos en juicio) puesto que como legalmente jamás le entregaron esos documentos, él no pudo hacer una defensa contra ellos y como ese fue el único elemento que tenía la autoridad contra Jaime, el Tribunal resolvió que la auditoría quedaba nulificada porque se violaron los derechos humanos de Jaime. 

Moraleja, siempre en cualquier trámite de autoridades asesórate de la mejor manera posible.